Durante los años 90, las supermodelos dominaron las pasarelas, y entre ellas brilló con fuerza la alemana Claudia Schiffer. Con su cabello rubio, rasgos delicados, ojos azules y figura estilizada, conquistó los contratos más codiciados de la industria.

Su imagen elegante y carismática la llevó a ocupar un lugar privilegiado en el mundo de la moda.

Gracias a su éxito, Claudia Schiffer amasó una fortuna que algunas fuentes estiman en 100 millones de dólares. Cada acuerdo que firmaba incluía cifras millonarias: en 1992, logró un contrato exclusivo con la marca Revlon por 6 millones de dólares anuales durante una década.

Además, trascendió que recibió 3 millones de dólares por protagonizar una publicidad de Citroën.

Su popularidad en esa época era tal que medios como la revista ¡Hola! de España la comparaban con la icónica Brigitte Bardot.

También, Claudia Schiffer llegó a aparecer en miles de portadas de revistas alrededor del mundo, consolidando su estatus como una de las grandes leyendas del modelaje.

Claudia Schiffer: su vida después de las pasarelas

En 2002, Claudia anunció que su último desfile sería el de Yves Saint Laurent de ese año.

Sin embargo, en 2017 hizo una breve reaparición para rendir homenaje a Gianni Versace, acompañada por otras supermodelos de los 90.

Este regreso dejó claro que la moda sigue siendo parte de su vida, incluso después de su retiro de las pasarelas.

A lo largo de los años, Claudia ha mantenido un perfil más bajo en lo personal.

Se casó con el productor de cine Matthew Vaughn y juntos formaron una familia, teniendo tres hijos: Casper, Clementine y Cosima. Actualmente, a sus 54 años, reside en un pintoresco castillo en el campo, a las afueras de Londres, según fuentes de Los 40.

En el ámbito profesional, Claudia sigue siendo un referente. Aunque no desfila con la misma frecuencia, realiza campañas fotográficas y colaboraciones con marcas, como una exitosa línea de vajilla.

Además, se ha convertido en embajadora de Unicef, apoyando causas importantes alrededor del mundo.