Los hondureños celebrarán el más importante evento espiritual en el país. La trigésima primera alborada en honor a la Virgen de Suyapa, que este año cumple doscientos setenta y siete aniversario de su hallazgo en el sector del Piligüín en la periferia de la capital.

Como es una tradición religiosa, los peregrinos aprovechan para viajar a Tegucigalpa desde todos los puntos del territorio nacional para converger en la Basílica Menor de Suyapa y en la Ermita para participar con devoción en la fiesta mariana.

Este año se espera una afluencia de casi dos millones de personas en nacionales y extranjeros para pedirle a la morenita milagros de sanidad, prosperidad, reconciliación familiar, transformación personal.

Pero son más los que acuden para cumplir sus promesas de agradecimiento por sus milagros y todos tienen un testimonio que compartir los detalles en Porque Nos Importa:

La virgen de Suyapa, una diminuta imagen de 6,5 centímetros de alto, tallada en madera de cedro, fue hallada, según apuntes históricos, por los campesinos Alejandro Colindres y Lorenzo Martínez el 3 de febrero de 1747, cerca de Tegucigalpa.

Cada año, muchos de los creyentes llegan del interior del país y pernoctan en campamentos instalados por cuerpos de socorro, mientras que otros lo hacen en el interior de la Basílica.

También, los alrededores del santuario de Suyapa son ocupados, además, por comerciantes que venden artesanías de barro; y madera con imágenes de la patrona de Honduras; camisetas, gorras, llaveros, lo mismo que comidas, refrescos, agua y dulces.